La Asociación de la Prensa de Cádiz y el Colegio Profesional de Periodistas de Andalucía quieren mostrar un enérgico rechazo a la situación sufrida por una periodista en la cobertura de la manifestación celebrada por la unidad de España el sábado 30 de septiembre, cuando se concentraba frente a las puertas del Ayuntamiento de San Fernando.
La periodista se encontraba tomando imágenes de la concentración con un teléfono para cubrir los hechos, cuando recibió el acoso de al menos dos personas que trataron de intimidarla grabándola con un teléfono móvil y hostigarla en el ejercicio de su trabajo.
Los periodistas somos depositarios del derecho constitucional a la información, y forma nuestro trabajo dejar constancia de los hechos, e informar u opinar de él en libertad, sin coacciones, y respetando criterios de rigor y veracidad.
Es importante distinguir entre un manifestante que acude voluntariamente a una concentración y formar parte de un hecho público, que además persigue la notoriedad y repercusión mediática y el periodista que tiene que cubrirla por obligación profesional, y que no forma parte del hecho noticiable, ni tiene por qué consentir que entre mensajes agresivos se vea grabado y desprotegido de su derecho a la propia imagen. Desde la APC y el CPPA rechazamos estas prácticas intimidatorias, que sin duda pretenden coartar el libre ejercicio de la profesión.
Por último, desde la APC y el CPPA queremos hacer un llamamiento a la calma en estos momentos de tensión y crecimiento de los extremismos y la polaridad de opiniones, que están afectando seriamente al ejercicio de nuestro trabajo, como han denunciado previamente diferentes colegios de periodistas, asociaciones de la prensa o entidades como Reporteros Sin Fronteras, e interpelar a la sociedad y los poderes públicos a que sean respetuosos con el trabajo de quienes tienen la obligación de informar sobre estas situaciones.